Marcos Maidana recibió un duro fallo dividido a favor del ucraniano. De esta manera, sufrió su primer revés en veintiséis combates como profesional.
Las derrotas nunca son fáciles de asimilar, y por supuesto, ésta no fue la excepción. Pero la que le tocó vivir a Marcos ``el Chino´´ Maidana tiene un gusto a verdadera injusticia. Sí, así tal cual como suena: in-jus-ti-cia. Porque el santafesino de 25 años, ha dejado la impresión de haber acertado no sólo en mayor cantidad, sino también con mayor precisión, vehemencia, determinación y profundidad que el púgil ``local”. De hecho, Andreas Kotelnik padeció las secuelas de tamaña andanada de golpes, en su rostro y cabeza con una entereza absolutamente admirable. Es difícil explicar cómo se pudo mantener en pie cada vez que el “Chino” trabajaba con cross de diestra al parietal izquierdo y a la mandíbula y tirando instantáneamente a los flancos, en innumerables ocasiones. Varias veces, especialmente a partir del octavo asalto, tuve la sensación que Kotelnik cedería ante los fulminantes impactos del argentino. Castigó despeadadamente desde todos los ángulos posibles, la humanidad del teutón.
El “Chino” se adueñó del cuadrado en base a su buena partida de mano izquierda para luego dar paso a su devastadora diestra cruzada al rostro, condimentándolos con sorpresivos y precisos ascendentes al cuerpo. De ahí en más fue cosechando una imagen nítida y positiva en nuestra tarjeta. Con ese envión anímico, el santafesino continuó con su estrategia de hacer sentir su verdadero poder de pegada. Apuntó a la cabeza y llegó. Luego descargó a los flancos, al rostro, uppercut – una y otra vez al mentón – y el combate adquirió un matiz electrizante. Parecía que el pleito se encaminaba hacia la vía del nocaut. Pero, debido al excesivo desgaste del argentino durante éstos dos últimos asaltos, el Chino careció de resto suficiente como para finalizar su faena ante un Kotelnik de impecable trabajo de bloqueo. En efecto, al finalizar el noveno round, Marcos Maidana tenía dos puntos de ventaja sobre el campeón.
Es necesario destacar que durante las primeras siete vueltas, Kotelnik había lanzado en menor cantidad de golpes, pero cada vez que soltó el jab de izquierda llegó a destino. Es que el Chino de Margarita o se confió por demás o se olvidó de subir la guardia, un grave error que para el cómputo de los jueces es una falencia importante a la hora de armar sus respectivas tarjetas.
A la salida del décimo asalto, el sudamericano se limitó a regular energías y le cedió el centro del ring al ucraniano, quien trabajó al cuerpo e incluso hizo retroceder al Chino – hincha de Colón de Santa Fé – con dos envíos en recto al rostro.
El argentino volvió a la carga en el anteúltimo round, con desprolijidad pero con aciertos en forma de uppercut y resonantes hooks, ya que sus boleas de diestra eran por demás anunciadas para el inteligente y frío europeo. Quiso llevarse por delante ``a lo indio´´ a Kotelnik porque sabía que debía impresionar a la terna del ring side.
Promediando los últimos quince segundos, reaccionó el teutón con golpes cortitos y cruzados aunque no del todo profundos. Hasta ese momento, Marcos Maidana estaba dos puntos arriba según mi apreciación.
Debía jugarse el todo por el todo el Chino, y así lo hizo en el último episodio. Con la nariz sangrando y visible hinchazón en sus pómulos, el campeón soportó el embiste descomunal del jóven argentino. El santafesino le propinó una verdadera paliza a la cabeza, mandíbula y región hepática. Un vendaval de impactos con veradero poder destructivo que nunca había sufrido el experimentado defensor de la corona, Desairado, Kotelnik atinó a ensayar un par de envíos secos en recto, aunque el ímpetu del visitante había logrado prevalecer sobre un Kotelnik que carecía de ese fuego interior y hambre de gloria que sí demostró tener Marcos René Maidana.
En definitiva, el fallo de los jueces dictaminó por decisión dividida que Andreas Kotelnik defendió exitosamente su cetro Superligero de la AMB. Dos de ellos le otorgaron la victoria a un boxeo técnico y práctico como fue aquél del púgil de 30 años, nacido en Lvov – Ucrania-.
El “Chino” Maidana ha hecho un muy buen combate, el más extenso en su carrera – ya que había peleado como máximo a ocho asaltos frente al mexicano Manuel Garnica, ganando por nocáut en la séptima vuelta, el 7 de abril del 2007 -. Esta vez no pudo adjudicarse ese ansiado cinturón por el que tanto ha luchado. Sin dudas, la experiencia de este pleito le será de mucha enseñanza a éste jóven oriundo de la tierra que vio nacer a Carlos Monzón, Juan Martin Coggi, Julio César Vásquez, Carlos Baldomir. La gente de Santa Fe, debe estar orgullosa del Chino Maidana, fue ésta su primera pelea frente a un hombre que había disputado tres combates mundiales ante legítimos campeones Welter Jr. CMB y AMB como Junior Witter, Souleymane M´Baye, por nombrar algunos de sus rivales más destacados.
Ha brindado un vibrante espectáculo el santafesino, y eso no se borra ni en la memoria del público presente ni en los que vivimos el combate a través de la televisión.
Fuerza Chino que ya tendrás una nueva chance por una faja, te la merecés.
ROMERO DIEGO.
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