domingo, 28 de junio de 2009

¡Narváez le dio lustre al Luna!


El trelewense Omar Andrés Narváez, primer sudamericano en ser declarado SÚPERCAMPEÓN (segundos antes su 16ª exposición), superó categóricamente en el undécimo, a un persistente retador azteca: Omar Soto.

Al finalizar la refriega – manejada de principio a fin por el hombre que se consagrara campeón ecuménico mosca OMB aquél 13 de julio de 2002, ante Adonis Rivas-, las más de 10000 almas agolpadas en cada rincón del legendario recinto, se vieron desbordadas de satisfacción, regocijo, gratitud.

Ni bien llegó al vestuario, sostuvo: ``parece fácil, pero tampoco es tan fácil. A mí también me pegan. Hoy tuve que cuidarme de los cabezazos, de los golpes duros porque no la tiraba tan livianita mi rival. Todo el mundo pensaba que iba a haber mucha diferencia de potencia porque él venía de una categoría inferior, pero yo no sentí eso. Al contrario, lo sentí más peligroso que a Rayonta Whitfield.´´

En los tres primeras vueltas, el huracán fue calentando motores (¡ah! a propósito, le encanta andar en moto) y a partir del décimo minuto de haber comenzado el pleito, fue agigantándose con cada jab de izquierda (sin secuelas, de aquella recordada lesión), rotación de cintura para aplicar el golpe justo y así quebrar la barrera de contención del mexicano que no ahorraba en impactos.

Se sabe que Narváez (30-0-2, 19ko) es un verdadero tiempista, astuto para manejar psicológicamente el desarrollo de las acciones y eso mismo reflejó en los asaltos intermedios. Soto también castigó severamente, en más de una ocasión, los flancos del patagónico. No obstante, al aplicar envíos a la zona alta, sus puños se perdían en los antebrazos del encumbrado argentino.

El octavo obligó el descuento de un punto para el visitante, por ir con su cabeza hacia el frente, en esos cruces razantes. El noveno se lo llevó nuevamente el huracán y el décimo, al regular Narváez, se lo adjudicó el lobito.

Llegado el anteúltimo capítulo, Omar Narváez culminó la faena con un exquisito recto de izquierda, se desmoronó el mexicano y Roberto Ramírez Jr. decretó el efectivo nocáut.

El huracán volvió a soplar, se acreditó su décimo sexta defensa del cinturón mosca de la Organización Mundial de Boxeo y se encuentra a sólo un paso de igualar al tailandés Pongsaklek Wonjongkam.

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