
En un fallo localista que el equipo de CAMPEONES EN EL RING no comparte en absoluto, Marcela Acuña retuvo su faja CMB súpergallo.
Los jueces diagramaron la victoria así: 96/94 (Hugo de León), 96/95 (Héctor Primerano) y 95/95 (Aníbal Andrade).
Según nuestra perspectiva, la formoseña (33-5-0, 16ko) ganó inobjetablemente el segundo y el quinto asalto. El segundo por haber conectado con precisión al rostro (cross zurdo) y más tarde otro cruzado casi a la misma altura, pero de derecha. Por otra parte, en la quinta vuelta marcó el terreno con izquierda a la zona alta y mejoró su imagen tras impactar a Ashley sobre la mandíbula con un cruzado de derecha, al final de ese episodio.
Todo lo demás fue una exquisitez de Alicia Ashley, una boxeadora profesional de primerísimo nivel: dos veces medallista de oro al coronarse campeona nacional como boxeadora amateur (1997, 1998), ganadora de los Guantes de Oro de la Ciudad de Nueva York (´96, `97, `98), tri campeona mundial como profesional, enfrentó a las mejoras púgiles y en su mejor momento y un dato no menor: corrió un maratón de 42km en noviembre pasado, en New York.
Alicia Ashley (a punto de cumplir 42 años, pasado mañana) hizo gala de su destreza, técnica, timing, quiebres de cintura e impecable traslación del ring. En definitiva, dio una instrucción de boxeo (recordemos, es entrenadora de boxeo). Podemos jactarnos de decir que no nos sorprendió en lo más mínimo. Conocíamos sus rivales, y la nota CARA A CARA CON ASHLEY reflejaba a las claras qué sucedería.
La bisagra del match se produjo en el despertar del sexto round. Por entonces, las reservas de la argentina mermaban y las de Ashley (14-9-1, 1ko) abundaban. Así la jamaiquina descargó a voluntad, primero izquierda-derecha al rostro, izquierda a la mandíbula, y jab con profundidad.
Séptimo capítulo: una derecha al rostro, otra a la frente, traslación, quiebres de cintura, rodamientos de cuello. Toco y me voy.
Del octavo al décimo, lo más significativo ha estado plasmado en un ascendente elegante y espectacular por contundencia y velocidad de partida, con destino de mandíbula, en la novena vuelta. Y el décimo se resumió en perfecto trabajo desde la distancia, izquierda en punta y persecución para desestimar cualquier duda respecto a su esgrima pugilística.
En resúmen, para el conjunto periodístico de este programa, el triunfo de Ashley ha estado en cuatro puntos: 97/93.
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