68 años

(Especial para LA OPINION, por Tomás Rodríguez).

- Aproximadamente a las 22 del sábado 7 de agosto de 1942, el Día de San Cayetano, cuando la grey católica conmemoraba con misas y rezos en la entonces localidad de San Javier, rogando para que en los hogares más pobres haya paz, pan y trabajo, en una humilde vivienda (de barro, con piso de compacto natural y techo a dos aguas de paja) del barrio La Flecha, en el norte del éjido urbano de la cabecera del departamento homónimo, nació Carlos Monzón, quien 28 años y tres meses más tarde se convertiría en campeón mundial de boxeo de peso mediano.

El octavo hijo del matrimonio conformado por Roque Monzón y Amalia Ledesma, ambos naturales de Saladero Mariano Cabal, fue bautizado por el padre Belicio Lorenzón el 28 de agosto en la Capilla de San Francisco Javier, siendo sus padrinos Catalino Bazán y su esposa, Antonia Maciel, vecinos del lugar.

El matrimonio Monzón tuvo 13 hijos; Zacarías fue el mayor; siguiéndole Nicéforo, Rosa; Rosendo Albino; Inocencio; Marta Elsa, Alcides René; Carlos fue el octavo, sexto varón; luego le siguieron Elba Yolanda, Delia Beatriz, Edgardo Reyes, Reynaldo Oscar y Víctor Hugo, respectivamente.

En notas aparecidas en revistas deportivas, Monzón aseguró que las primeras piñas las dio cuando se peleaba con otros chicos que se ganaban también la vida en la calle y contó cómo nació su vocación por el boxeo profesional, cuando Américo Bonetti, Ramón Vargas, Oscar Cadenas, Ramón Perelló, aparecían como los más reconocidos en el orden local.

Contó Monzón que Luis "Gato" Andrada, representante de competencias deportivas, mientras le lustraba los timbos, le dijo que "ser boxeador es una actividad que te puede abrir el camino en la vida.Tienes que ser inteligente, pegar y evitar que tu ocasional oponente te golpee en el cuerpo y rostro".

El 7 de octubre de 1959, Monzón debutó como aficionado en el Pabellón Deportivo (de la Sociedad Rural de Santa Fe) teniendo como oponente a Raúl Cardozo y fue empate. Dijo entonces que un par de simpatizantes de la discreta concurrencia llegó a gritarle "¡Dedicate a otra cosa! En el desquite le ganó por nocaut en la segunda vuelta. Su primera pareja fue Zulema Encarnación Torres, a la que conoció cuando tenía 16 años; tuvieron un hijo, Carlos Alberto y vivieron juntos entre 1958 y 1961.Un año después, Monzón se casó con Mercedes Beatriz García, a la que "Escopeta" llamaba con cariño "Pelusa", que tenía 15 años.Carlos Monzón debía cumplir con el servicio militar obligatorio (por número alto en el sorteo le había tocado Marina, dos años) pero se salvó porque el 20 de febrero de 1963 nació su hija Silvia Beatriz.

Durante esa temporada, Monzón realizó su última pelea en el campo amateur cuando le ganó por decisión a Bienvenido Cejas el 12 de diciembre. Había reconocido que para esa fecha en algunas peleas cobró unos tres mil pesos, que los invirtió para comprar un terreno.Al año siguiente, el 6 de febrero, debutó en el profesionalismo en un festival en el Club Sportivo Ben Hur de Rafaela, enfrentó a Ramón Montenegro, venciendo por KO técnico en la segunda vuelta. El dinero que percibía por combate aumentó; ahora era de entre dos y tres mil pesos por pelea.

Monzón comenzaba a presentarse en el interior del país, iniciándose los contactos entre el técnico Brusa y el promotor del Luna Park, Juan Carlos Lectoure, anunciando "Tito" que iba a realizar un selectivo para determinar el oponente de Jorge José Fernández, por el título de los medianos.

Cuando tenía nueve peleas en el profesionalismo, Monzón tuvo la segunda chance para actuar en el Luna Park, fue ante el platense Antonio Aguilar, transmitida por Canal 7, ganando el bonaerense por decisión, el 28 de agosto de ese año. El santafesino reconoció que en esa pelea había sido un desastre.

Luego de obtener el título de campeón de la ciudad de Santa Fe y de la Provincia, Tito Lectoure lo convocó para participar del cinturón "Eduardo Lausse", cuyo ganador obtenía el derecho de enfrentar a Jorge José Fernández por el cetro nacional de los Medianos, siendo el gran desafío de Monzón y de su adiestrador Brusa.

El fuerte pegador santafesino continuó presentándose en el país y en Brasil, recibiendo el 17 de noviembre de 1965 el afectuoso saludo de Tito Lectoure, después de enfrentar en el Palacio de los Deportes a Celedonio Lima (GPKO 5). Casi a fines de ese año, el 8 de diciembre, se tomó revancha con el platense Aguilar, derrotándolo en ese escenario.El 3 de septiembre de 1966 enfrentó en el Estadio Luna Park a Jorge Fernández por la faja argentina de la división, quien tenía como antecedentes 113 peleas, incluyendo una por el título mundial con Emile Griffith, de las Islas Vírgenes, en 1962 y un tiempo antes había mandado al hospital a un contrario.

Aunque esta vez Monzón no pudo ganar por la vía rápida, el momento decisivo fue un impresionante golpe de derecha que casi saca al "Torito de Pompeya" del cuadrilátero. El boxeador conducido por Brusa ganó 300 mil pesos, terminó su propia casa y no tuvo que volver a trabajar.Su segundo hijo varón, Abel Ricardo, nació el 19 de octubre de 1966.

Monzón no olvidaba sus raíces y al barrio Barranquitas Oeste, siempre iba a visitar a sus amigos que concurrían al desaparecido bar "La Serrana", frente al corralón municipal y detrás del Club Unión, al que Pelusa llamaba "La Facultad" y a su par del Club Rio de Janeiro.

NUNCA PERDIO POR UN TITULO

Esa verdadera leyenda del boxeo argentino llamado Carlos Monzón, en el campo rentado entre el 6 de febrero de 1963 y el 30 de julio de 1977, con un centenar de luchas bravas frente a rivales de todas las características que definen al deporte de los puños, en 21 confrontaciones (poco más de la quinta parte de su campaña) subió al ring para disputar un título.

CAMPEON PROVINCIAL

El 4 de febrero de 1966, en la desaparecida cancha de básquetbol del Club Atlético Unión de Santa Fe, ganó el título provincial al rosarino Ramón Dionisio Rocha, por decisión en 10 capítulos. Cabe señalar que nunca expuso dicha faja.

FAJA ARGENTINA

"Escopeta" Monzón peleó dos veces por el cetro nacional de los 72,574 kilogramos. El 13 de septiembre de 1966 el "Hombre de Hierro" se consagró campeón argentino de la categoría Mediano al derrotar por puntos en 12 asaltos al porteño Jorge José "Gallego" Fernández.El pupilo de Amílcar Oreste Brusa sólo expuso una vez el título argentino, el 11 de febrero de 1970 cuando noqueó en el mítico Estadio Bristol de Mar del Plata en el sexto asalto al platense Antonio Oscar Aguilar, uno de los tres vencedores del indomable sanjavierino, de quienes se tomó amplio desquite..

CETRO SUDAMERICANO

Cabe apuntar que Monzón efectuó tres combates por el título sudamericano de la especialidad. El 10 de junio de 1967, en el llamado "Palacio de los Deportes", de Corrientes y Bouchard, le arrebató la corona también al "Torito de Pompeya", Jorge Fernández en 12 peldaños, en fallo unánime. Dicha faja la expuso en dos ocasiones; el 10 de enero de 1969, en el estadio de Unión, noqueando al uruguayo Ramón Orrico en el noveno asalto y el 27 del mismo año venció por la vía rápida en seis asaltos al brasileño Manoel Severino..

CAMPEON MUNDIAL

Hasta que el promotor Juan Carlos "Tito" Lectoure consiguió la oportunidad para que Monzón -clasificado número dos en el escalafón universal- combatiera por el título ecuménico de la categoría Mediano, el 7 de noviembre de 1970, por una bolsa de 15 mil dólares, en el "Palazzo Dello Sport" de Roma. En esa oportunidad, el pugilista santafesino se consagró campeón del mundo -versión Asociación (AMB) y Consejo Mundial de Boxeo (CMB)- al derrotar a Giovanni "Nino" Benvenutti. Fue una pelea épica, en la que venció por nocaut en el 12ø asalto, con un espectacular golpe de derecha.

Este cetro Monzón lo defendió luego en forma exitosa en 14 oportunidades: G. Benvenutti (Italia), dos veces a Emile Griffith (Islas Vírgenes), Jean Claude Bouttier (Francia) y Rodrigo Valdez (Colombia); Denny Moyer (EE.UU.), Tom Bogs (Dinamarca), Bennie Briscoe (EE.UU.), José Angel "Mantequilla" Nápoles (Cuba-México), Tony Mundine (Australia), Tony Licata (EE.UU.) y Gratien Tonna (Francia-Tunez), respectivamente.

La historia boxística precisa que "El Macho" como lo llamaba su amigo, el actor, productor y director cinematográfico y empresario galo, Alain Delon, se calzó los guantes y subió al cuadrilátero como profesional 100 veces, con 89 victorias, 61 de ellas por fuera de combate, registrando además siete empates, solamente tres derrotas, tomándose luego amplia revancha con el platense Antonio Aguilar, el español nacionalizado brasileño Felipe Cambeiro y el puntano Alberto del Carmen Massi y la restante, sin decisión.

El 29 de agosto de 1977 Carlos Monzón anunció oficialmente en el hotel Sheraton de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en la capital de Argentina, su retiro definitivo del deporte de los puños, enviando los telegramas a la AMB y el CMB. Posteriormente formó pareja con la modelo uruguaya Alba Alicia Muñiz Calataryud, naciendo Maximiliano Roque el 28 de diciembre de 1981. La relación culminó el 12 de agosto de 1986, su vida comenzó a esfumarse cuando se separaron. Hubo reconciliaciones y acercamientos, culminando en la madrugada del 14 de febrero de 1988, en el primer piso del chalé de Pedro Zanni 1567 del barrio La Florida de Mar del Plata, cuando presuntamente tras una discusión ambos cayeron del balcón, unos 3,70 metros. El 3 de julio de ese año Monzón fue condenado por homicidio a 11 años de prisión, cumpliendo la pena en las Unidades Penitenciarias de Batán y Junín en la provincia de Buenos Aires y de las Flores de Santa Fe. En 1993 obtuvo el permiso de salida, trabajando en el gimnasio de la seccional Santa Fe de la Unión del personal Civil de la Nación. El 8 de enero de 1995, tenía 52 años y cuando regresaba a la Unidad Penitenciaria Nø 2 de la Provincia, manejaba un Renault 19 a unos 140 Km/h por la RP Nø 1, el automóvil salió de la carpeta asfáltica, dio varios tumbos y quedó sobre el pasto, muriendo Monzón y un amigo acompañante. En ese preciso momento, la leyenda de Carlos Monzón, el inolvidable campeón mundial de los medianos, el más grande boxeador argentino de todos los tiempos, se transformó en un mito...